jueves, 29 de noviembre de 2007

...

Ven, ven a ver quién demonios está por ahí...
Yo no sé quién me sigue en la oscuridad.
No, no veo bien, si me vuelvo se esconde otra vez..
Quién será? Qué querrá ahora de mí.....
Quiero correr pero no se separa de mí...siempre ahí, no se va, qué buscará...?

No, no tendré la gran suerte conmigo esta vez
No podré, no sabré enfrentarme a él.
Quién puede ser...
Creo que lo sé....


... se parece tanto a ti...

jueves, 22 de noviembre de 2007

Recuerdo....

.... cuando salía pronto de trabajar y me iba al pueblo más cercano de casa en autobús para comprar guisantes crudos.
... cuando mis compañeros de trabajo suecos organizaban fiestas en sus casas y todos aportábamos algo.
... cuando me tocaba trabajar de noche y "cogíamos prestados" postres sobrantes para comérnoslos escondidos en la cantina.
... cuando a la adorable Kate se le quemaban las tostadas.
... cuando mis queridos housemates cocinaban con esas salsas austríacas tan raras.
... cuando mi amiga dejaba los zapatos enmedio de la puerta al entrar en casa y todos los que llegaban después se tropezaban.
... cuando me compré un cuadro de los hermanos Grimm en una Charity Shop.
... cuando llamé un día al trabajo para decir que estaba enferma y me fui al zoo.
... cuando fui a patinar sobre hielo con tejanos.
... cuando fuimos a un restaurante de tapas con toda la ilusión del mundo y no tenían tortilla de patatas.
... cuando me bebía esos mega-batidos naturales de chocolate blanco, tan espesos que casi no pasaban por la pajita.
... cuando adopté una ovejita en la "Bear-Factory" y la cosieron delante mío.
... cuando fui a ver Jeepers Creepers 2 sólo porque la hacían justamente a la hora que llegué al cine.
... cuando fui a Londres dos días antes de Navidad, y nevó.
... cuando hicimos una fiesta en una casa donde no se repetía ni una sola nacionalidad.
... cuando le llevé a un cliente una "Special Marriott Burger" y al llegar me di cuenta que dentro del pan no estaba la hamburguesa.
... cuando intentaba que me gustaran todos los cereales y la leche sola.
... cuando un día me desperté a las 8 sin saber si era por la mañana o por la noche y como me dio tanto corte preguntar esperé a ver si se hacía de día.
... cuando me puse mala por comer rape en mal estado.
... cuando ningún amigo hablaba mi idioma.
... cuando mi única preocupación era encontrar un adaptador de 3 clavijas.

Pero también recuerdo... que se me debe olvidar recordar.

miércoles, 21 de noviembre de 2007

Tú que tienes?

Bueno. Vale. Sí. Estoy de acuerdo. Totalmente de acuerdo. 100%. Si empiezo un blog, tengo que seguirlo. Si hago que os toméis la molestia de hacer click en mi link, debería agradecerlo de alguna manera. Y en estas circunstancias, me temo que la más factible es escribir (o como lo llamaría yo en uno de mis arranques originopsicóticos, vomitar letras y hacérselas comer a otros).

Pero escribir no es tan fácil eh? A veces se atragantan las letras, otras veces simplemente soy demasiado vaga como para sentarme delante de una silla y tocar teclitas. Y que conste que ese es el único esfuerzo, porque está claro que lo que voy a escribir no me lo invento, lo leo directamente de mi cerebro (que a su vez ha sido escrito por mi inconsciente, al que aún no tengo el placer de conocer).
En qué empleará su tiempo el inconsciente? Trabaja siempre? Trabaja para mí? Le pago lo suficiente? O quizá empezará una huelga en breve... Ais, hay tantas cosas que me gustaría preguntarle... Como por ejemplo qué veo cuando no miro. O qué digo cuando no hablo. Pero me temo que me quedaré con la duda...Total, he vivido con ella hasta ahora y sigo aquí.

Escribir también lleva su tiempo. "Su tiempo" es una expresión tan corta como falsa. El tiempo no puede ir acompañado de un posesivo porque nadie lo tiene, no? O lo tenemos todos? O nos tiene él?
Argh, tener, tener, tener....Tengo ansia de tener... todo el mundo tiene cosas y no tiene nada... porque la nada no se puede tener. Porque la nada es nada.

Pero luego hay otras veces en las que me apetece mucho ponerme a soltar frases. Es entonces, en esos momentos de lucidez, que me preparo torpemente, superorgullosa de mí misma, de mi capacidad de decisión, de mi poder expresivo, de mi imaginación novata, cojo aire, respiro hondo, pongo las manos en posición, miro la pantalla y... oh! Dónde han ido las letras?Ah sí, que las tenía que poner yo! Pero bueno, en qué estaría pensando?Um... bueno, ya lo haré después...

Total, tengo tiempo.